EL SÍ DE MARÍA

 

Te has preguntado porqué la Virgen María marca de gran manera una historia sin igual en la vida de los cristianos, por qué ha sido la elegida del Padre para ser parte de la historia de la salvación. Todo esto lo descubrirás en este texto.



  1. MARÍA EN SUS INICIOS


Cuenta la tradición cristiana que los padres de María fueron San Joaquín y Santa Ana, los cuales no habían podido tener hijos, por ello se encomendaron a Dios para procrear. Se dice que San Joaquín se retiró 40 días al desierto para hacer oración, mientras que a Ana se le apareció un ángel anunciando el nacimiento de María. A su tiempo nació la Madre de Dios en Nazaret, de familia sacerdotal y de modestas condiciones económicas pero rica en santidad y muy cumplidores de la Ley según lo relata la escritura en San Lucas 1,22.


  1. “FIAT” DE MARÍA


San Lucas es quien relata el acontecimiento de donde surge la historia de la salvación, el nacimiento del Mesías, el hijo de Dios. En este evangelio se nos presenta la figura de María, una mujer de edad corta pero con hambre de Dios, ella conocía de las escrituras y por ello supo que la Visita que el ángel de Dios le realizó, no era más que una voluntad divina. Ella había sido elegida pero Dios le otorgó la libertad de decidir si aquello que le había anunciado el ángel fuera aceptado por ella o no. Antes de tomar esa decisión, María debía pensar que podía perder la vida con el simple hecho que iba a concebir un niño fuera del matrimonio y que cualquier mujer en estos casos debía morir apedreada. Otro pronóstico acertado era que su prometido, José, no iba a creer que el ángel de Dios era quien había visitado a la joven. Ante todo lo malo que se le podía venir encima, María toma el coraje y dice “FIAT” que significa hágase, aceptando todo lo que Dios había preparado para ella.


El fiat de María no es una palabra sin fondo, al contrario, con esa respuesta la Virgen María cambió totalmente el destino de la raza humana, dando paso a la salvación de todos, cambió radicalmente la vida de María y la de San José su esposo, después de acá se venían días de alegría pero también de agonías y tristezas. Nuevamente se ha cumplido lo que los profetas del antiguo testamento habían anunciado.


  1. MARÍA COMO INTERCESORA


Según cuentan los evangelios, Jesús estaba preparando el momento exacto de hacer pública su aparición, indicando que no era su momento, pero vemos la figura de Nuestra Madre María como una eficaz intercesora para el cumplimento de las peticiones de los creyentes. En Juan 2 se nos relatan las bodas de Caná, evento en el que Jesús no quería ser protagonista, pero por petición y súplica de María, sucede el primer milagro de Cristo y aquí se da inicio al ministerio de Jesús. De esta misma manera en la actualidad, María sigue intercediendo por cada uno de nosotros toda vez nos dispongamos a seguir su ejemplo de seguidora fiel de la voluntad de Dios. Jesús de seguro no dudará en hacer posibles las peticiones que encomendemos en las manos de nuestra Madre, podemos tener por seguro que El Rosario es la herramienta precisa para acercarnos al Reino de Dios, es una escalera directa al cielo. 


  1. SEGUIDORES DE MARÍA COMO EL PAPA JUAN PABLO II


Para el año 2000, el Papa Juan Pablo II preparó una Encíclica titulada “Redemptoris Mater”, que habla sobre la figura de María como testigo fiel del Padre y como figura maternal de toda la iglesia peregrina. San Juan Pablo II siempre fue un ejemplo sin igual sobre el amor hacia Nuestra Madre, dedicando su pontificado a acrecentar el amor a María, prueba de ello es el lema que adoptó: “Totus Tuus María”, Todo Tuyo María. 


De esta misma manera nosotros como cristianos debemos acercarnos más a María, que a final de cuentas es nuestra Madre, el mismo Jesús nos la entregó en la cruz (Juan 19,26). Pues a ejemplo de Juan nosotros también llevemos a María a nuestra casa y con toda confianza digámosle que interceda por nosotros.


¡María Madre de gracia y Madre de misericordia, en la vida y en la muerte ampáranos gran Señora, Amen!


/ENij

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